viernes, 31 de diciembre de 2010

LOS VICIOS DE MANOS ENTRE MIS PIERNAS SE PERDIERON,



LOS VICIOS DE MANOS ENTRE MIS PIERNAS SE PERDIERON,
Llegue a desnudarme sin ni siquiera concordar, Subaste mis piernas he indague en los requisios de no pertenecer a nada y deberme a un placer tras una botella esta vez no de mal whisky, esta vez del whisky mas costoso en la vinatería de ese que numeran 12. Aunque mi mente siempre cedía a las noches de tequila barato y café.

Pendiente de nada, decidida a abortar todo pensamiento recibido con anterioridad por supremacías que acentúan la burocracia llamada horas de jornal...

Un traje de esos que acentúan las nalgas para que puedan apremiar mis ampliaciones, algún pendejo de corbata que cree, que vale más su puta firma, que sus poemas en prosa...

Delimite mis sentidos, asentí cuando debía de y negó cuando debía de. O la vis conversa la mayoría de veces, con el si señor, sin el mismo fin…encapsule mis no señor, mis bla bla bla .... y me perdí en aquello que denominaste
“perdida de sueños, cuando apenas eran sueños,”

Racimos que quedaron en nada, por el hecho de que manifiesto única y exclusivamente lo necesario. Frase que acentúa ahora todos mis escritos.

Para cubrir esos huecos de ansiedad, de esos que ahora me prohíben pensar en derechas o izquierdas absurdas, compre pollos con ese aguinaldo que pagan sus impuestos y se los regale a la prole, esa magnifica división que ni social, ni económica mucho menos religiosa, dejara de persistir, como algunas vez que creí en el comunismo, ahora no creo en nada.

Baya ni tibia, ni fria, ni caliente... mas bien húmeda.

Húmeda, de rasgar con historias reinventadas, en los reqisios de mi memoria acortada, por miedo de recordarte de mas, pero cumpliendo mi promesa y tu petición, esa que alguna vez escribimos

-"Quiero seguir soñando, es grato recordarla a todas horas del día, no me olvide por favor, no me olvide…" -

ahora me burlo de mi misma, como quien se mofa del primer protestante que llega a la plaza principal, diciendo que intenta ese wey, y me emputo como cualquier burócrata de mierda cuando una masa completa de fuerzas campesinas con las que alguna vez gritaste protesta inutil, no deja avanzar el trafico, y me olvido de el ideal y digo como buen hijo de mi madre santa -pinches huevones que se saquen a rascar los huevos a otra parte, que yo que si trabajo me roban el tiempo y yo sus impuestos al que denominaron sueldo de trabajador de gobierno-

y el sarcasmo de mi propia sátira se revuelve, y la mofa de mi persona, indaga en como puede con el roce de sus labios unos minuto entre 120-160, mientras es viento juega con una posterior irrealidad llamada subjetividad creativa, después de un par de meses mas bien y asi sin mas 1 maldito año si redactar algo, vuelvo a adueñarme de letras y por pinche necedad le vuelvo a escribir a quien forma parte de mis manías, a el que me dijo le dije y ahora calle, con quien nunca me revolqué mas que en pastos pintados que me asian vivir de esos holocaustos plasmados en espasmos entrapiernales y suspiros que irritan cuando entrecruzas la pierna de mas y la pantaleta te ayuda a reafirmar lo que sientes.

y ahora digo, pregunto y divago en la misma constante, como La proporcionalidad directa es un caso particular de las variaciones lineales. El factor constante de proporcionalidad puede utilizarse para expresar las relaciones entre las magnitudes. si nada fue mío por que sigo aquí, así de simple robando un poco de inspiración que ya no creí de luto, si no mas bien muerta ... si supieras cuantos cursos de tanatologia tuve que tomar para entender ese relevante paso, de cuando muerta se cree lo mas importante la inspiración que me asia suspirar cuando te redactaba y te sentía en letras.

y ahora, en mis ratos libres, me pongo pantalón de mezclilla esos que mis colegas llaman jeans que para mi siguen siendo mezclillas, que me monto mis tenis negros o a veces esas botas que no he de tirar, para un por siempre recordar que existirá el día del combate, y no alzare ninguna extremidad.

Y suspiro una vez mas, a la nada que retrae ese todo, y que todo era aun mas fácil cuando conducía a mi metáfora mal hecha entorno a las líneas paralelas, Dos líneas son paralelas (un tu y un yo)cuando se mantienen siempre a la misma distancia (también se llaman "equidistantes"), y nunca se encuentran, nunca se tocan, pero para sr paralelas se necesitan una a la otra. Y que para unirse solo necesitan a una transversal que podríamos llamarle tequila marihuana y deseo.

Y me doy un chingadazo en la cara para ver si reacciono y entiendo que me es menos complicado y mas digerible, lamer a un cenicero que probar esas bocas ajenas que saben a menta insípida. Y que sige en mi lista predilecta el buen blues John Lee Hooker , nina simon, bb King, entre otros que siguen restaurando mis deseos, y que cuando pienso otra vez en usted me llenan las ganas de redactar hojas, no solo de amores a medias, si no de lo que le hace recordar a este cuerpo que cree que no se a perdido que sigue, pero que piensa que comprendió que la acción vale mas que la protesta, que la reacción y que todo lo que da estar arriba, no solo es placer. Baya no tengo argumento ni justificación, pero bueno, me quede con un par de sensaciones, permítame, por que no permitamos cuando se pueda, así que le agradezco que no suponga ahora si debería, de decir jajaja pude plasmar un instante lo que quize decir, dije me dijo nos dijimossssss, nos besamos, nos sentimos y quiero romper todo esquema.
Cuando tenga tiempo hágamelo saber, quiero leerle, quiero charlar, quiero caminar y bla bla …

Jajaja una vez mas escribi algo…. XP

miércoles, 29 de diciembre de 2010

morir en ese instante.



Introspección.
Tan sóla yo tan sola.
Bien lejos del reflejo de tus ojos.
Y fórmulas cínicas, química solución.
Analgesia sin retorno.
Autodestrucción.
(en tu puta cara)
Y no sentir incrustada
la metralla cuando estalla
el corazón.

Mirada perdida hacia dentro
desde un cuerpo lejos de los 36 grados.
Petidina. Sumatriptán. Trozadona.
Y un "no me pasa nada, sólo estoy cansada".

Aveces no merece la pena salvarse.
Reserpina. Codeína. Dextrometorfano.

Quizá tú no tengas la culpa de nada,
pero sabes que no pienso plantar cara a este fracaso.
Levadopa. Mezcalina. Anfebutamona.

Quizá los remordimientos no te vuelvan loco.
Tramadol. Bromocriptina. Buspirona.

Así que déjame terminar de hundirme.
Jodida y elegante. Hermosa y triste.
Confusión. Arritmia. Midriasis.

Y que tú lo veas, sin perder detalle.
Hipertermia. Agitación. Delirio.

No pretendo que te sientas culpable.
Sialorrea. Hiperreflexia. Diaforesis.

Sólo que reconozcas mi cuerpo en el suelo,
cuando ya sea tarde. Que te dé por pensar...
Rubefacción. Convulsiones. Coma.

... y te quieras morir en ese instante.

La poesía
ahora
me sale hasta de la punta
de las pestañas.
Escribo tanto,
que tengo la cabeza llena
de líos.
Nudos a los que me amarras,
con cadenas flojas
al alma.
Rimas vuelven a mis inicios,
raros poemas de música detrás
y delante musas.
Da igual desnudas
que vestidas.

Me gustaría, en serio
explicarte como una persona
puede hacerte cambiar el mundo
por el suyo,
y como puedes hacer de una palabra
todas las sábanas sudadas
que te y nos gustaría manchar
de envidias y manías graciosas.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Efímeros recuerdos


La noche tempestuosa, llamaba la soledad,

Aquí en este punto sub real, donde es mejor sentir dolor, que soledad, Donde el viento misantrópico eleva la quedad de efímeros recuerdos.
Donde no se manumitiza a el alma, y los deseos iracundos pulen la perversión.

Estábamos completamente destrozados,
con el frio queriendo apagar nuestro interior,
pero la intensa excitación de aquel momento nos impidió todo reposo,
sentir tus manos arañando mi espalda,
mordiendo mis muslos, de poco, a poco,
dejando las marcas de pasión sobre mi piel,
aquellos pellizcos que sabes que vuelven locas mis caderas,
mientras esas manos tibias ante el frio, se deslizaban entre mis piernas, queriendo jugar un poco mi sexo.

Deslizabas la manga de aquel vestido aterciopelado sobre mis hombros asta encontrar mi desnudes.
Tu lengua probando mi esencia saboreando mis pechos, bebiendo el elipsis de mi ser,
de alguna o otra manera te obligo a que me muerdas,
mientras disfrutas entre mis gritos y quejas,
lo haces mas, un poco mas,
susurras palabras de amor a mi oído, yo, no puedo decir mucho,
no necesito decir mas, tómame necesito tenerte entre mis piernas para perder mis miedos y confiar en ti.

Se que aborreces mis uñas y estos dientes que no logro detener, lo hago despacio, tocando tu ser, queriendo aferrarme, mientras penetras entre mis piernas,
aquello me aqueja bastante,
pero ante el dolor suelo ser un poco estimulante.

Y nos vemos entre líneas épicas entre murmullos gritos y llantos de saber que te tuve, ahora regreso una vez más, con aquella soledad, y el vacio que me provocaste al hacerme emergen y después dejarme entre estos humanos, no te culpo,
ahora soy vagabunda de pisos con las alas desintegradas,
con la soledad tan desolada, que no importa mas esto,
que me hundo en recuerdos,
y la luna a vísperas resguardando mis pasos, aquella noche las suma de uno mas una dio 1 esta vez las reglas gramáticas se rompieron,
un día después me hallo otra vez entre tus manos con aquella separación entre cuerpo y alma…

Tu sigues ay de pie observo tus ojos te toco y tu piel se eriza solo intentas ignorarme te aferras aquella gabardina negra y te marchas intentando buscarme en donde no he de estar…

viernes, 3 de diciembre de 2010

Versos sádicos


Versos sádicos promulga mi mente,
Frases frías de vacios enclaustrados en mí, que se ha pasmado en limbos, por los entresijos de mi interior.
Infiero mi irrealidad como consecuencia de estas incautas, y perversas frases,
Salvo mis ojos de un impreciso flujo salino,
En este lugar debajo de la tierra, en que asienta la rueda y artificio con que se mueve la máquina de la tahona de diócesis caídos,
Lugar profundo, lejano, austero, sobrio, morigerado, sencillo, sin ninguna clase de alardes, agrio, astringente, áspero al gusto, retirado, frio, mortificado, penitente, nítido, suspendido.
Azuzar he incitar a las mentes magras de sensibilidad.
Las horas son tan solemnes que se asentan en este semblante de desdichan tés melancolías.
Retener las lágrimas me es imposible, se deslizan con suavidad sobre mi rostro,
Intento esconderlas entre mis manos,
Pero se desvanecen con el terror de el frio al que mi cuerpo se adhiere.
Escucho lacrimosas en mi cabeza,
Me invaden,
Me inhiben,
Me estremezco con mayor conmoción,
Solo una frase para mi eventual y no inusual estado, hipocondría,
De mirarte con aquellas ropas negras que acentúan el tono de tu piel,
Mirar esos bellos ojos negros rasgados, pero algo impide que se abran,
Deslizo mi dedo sobre esos labios apetitosos que resguardan mi esencia,
Con suavidad los acaricio temiendo a tus desplantes sádicos que provocas en mí,
Tu piel es pálida, como ase noches, mientras nuestros cuerpos casi muertos,
Sin aliento,
Con la luz de la luna como testigo,
Asían el amor,
Cuando eras mío entre mis piernas y los goces carnales,
Eludiendo el pecado,
Toco tus mano perdidas de tibieza, disipada de tu ser.
Me abrazo a tu recuerdo,
No te tengo,
No te hallo,
Lo que poseía,
Se esfumo entre mis manos por azares de dioses enfermizos de poder, sea por culpa o descuido del poseedor,
No lo se,
Sea por contingencia o desgracia,
No te tengo más…
Aquella tarde innata, me miraste entre las manos de aquel que me ensordeció con palabras dulces el oído,
Pero amor hoy en tu sepulcro,
Ante mi culpa incauta,
Se, que las manos tiernas de aquel,
no concebían con tus uñas en mi espalda,
Que su lengua que juega con mi dignidad,
No es tan confortable como las mordidas en mis muslos,
Entre mis piernas,
Por todas esas zonas hechas tuyas, a tu gusto,
Hoy te miro en esa caja que a de cernir tu ser,
Las miradas me culpan,
Los llantos me reclaman,
El se aferra a mi ropaje de luto,
Tu cuerpo comienza a descender, de poco, a poca, a las eternas penumbras,
Me abrazo a tu recuerdo,
Tu alma me alienta,
Yo no tengo disculpas… no hay mas,
Espérame amor, en el inframundo,
Que de pecados es mi alma,
Edén perdido para condenados,
Espérame sin ansia,
Que esta noche de mi soledad desolada,
En este mundo vil sin tu esencia que mata,
Sin tus dientes que sangran,
Sin tus uñas que rasgan,
Sin tus frases que desasen el alma,
Ya no hay causa que me retengan para no estar a tu lado,
Quise mirar mis horizontes sin tu crueldad refinada,
Con la misma saeta que arrebataste tu vida, la deslizo entre mis piernas, incrustándola suavemente, para recordar tus caricias, en un instante estaré en tus manos…
asiendo el amor a nuestra manera…

martes, 30 de noviembre de 2010

Tequila barato


Es que amarte… es como meterme a la ducha y querer que el agua me difumine, que de alguna manera se convierta en asido y pegue contra mi cuerpo como superficie solida.



Es que amarte… es como besar a un par de cables de alto voltaje sin cubierta, llorarle a un pedazo de tierra sepultado bajo el pavimento.



Es que amarte… es como beberme una botella tan añejada que sepa a agua de rosas de ase tiempo, como fumar en la pipa un pedazo de ruda de esa que amarga y hiela el instante.



Es que amarte... es detenerte en el pinche tiempo que me traga y solo me deja pasmada en ideologías que permanecen como realidades lánguidas ante la mirada.



Es que amarte… es como el olor a composta de la huerta de la esquina, como morder una fruta podrida de esas que su color se pierde y el sabor se concentra.



Es que amarte… es como escuchar ese puto blus que me escribiste, gravado con mi voz y la guitarra de un gran amante a las 3 de la mañana con la garganta aguardentosa.



Es que amarte es así de simple como el sexo sin orgasmos, como besarte sin morderte asta sángrate, arañarte asta dejar una que otra frase en la espalda.



Es que amarte… es como aquella taza de chocolate con dos de azúcar para no alterar mis sentidos, o como esa ultima de café con tequila barato.



Es que amarte… es tan estúpido como escribir por primera vez con las reglas de ortografía, como ponerme un puto vestido y una tanga para que acentué mis nalgas, como peinar mi cabello que creí sin remedio y hacerle el amor a mi amante sin pensar de ti…



Así de fácil es amarte, y olvidarte tras unos ojos marrón, que sabe de sexo y dolor …

Buscando ser la puta:


halle entre mis piernas, el deseo de usted, desnude con caricias el pudor,

similitud, apariencia, subjetividad de mis manos, lo mas grafico, a su sexo

jugueteando con mi orgasmo, aparate tras su lengua.

Un gemido, a la despedida de amores intrascendentes de noches estéricas,

llene de esterilidad la egocéntrica de mis miedos, lamí la punta de

mis manía acogidas, por ese pasado tan presente...

Etílicos aromas desprendidos de la pipa encendida…

Atavié la penúltima entrada de desdén mi sexo…

Adule sus hombros cansados de las mismas piernas, buscando aliviarlo con

mi boca.

Pregunte tres veces cada tres minutos

¿le lastimo?

Pero la impertinencia se acogía en la brusquedad de mis caderas,

Con la conducción de sus manos,

Renunciando a el ¡detente! del viento, pronunciado por los labios ajenos,

portadores de los dientes encajados en geografías pertinentes

a mis conocimientos...

Le rindió una lágrima a la pulcridad que se llevo esa noche,

vuelta madrugada, mientras sollozaba el arrepentimiento de el otro

lado de la cama ...

La lucidez deslumbraba los dogmas violados,

para por lo menos una noche olvidar el vicio de la soledad…


.

la soledad, un vicio


La soledad,
Un vicio que otrora los requisios de la necesidad,
Las manos ausentes de calor,
Caderas deseosas de algún movimiento brusco entre las piernas.
Labios lastimados de mordidas nocturnas,
Por los dientes propios del deseo.

Ya tiene noches, que no recurre a la mano en la entre pierna,
Oh al calor de un fiel amante,
Días, que no habla de ese instinto prevaleciente
En el lóbulo izquierdo del pensamiento,
Tardes, de hoteles baratos, gritos de puntos críticos,
Clímax extraviados, ataviados después de un trago de mal whisky.

Sus escritos, más malos que nunca,
Y sus nauseas por todo lo que lee,
Se olvido del cielo,
Y por lo mismo ya no toca la tierra,
Suspendida en ese punto
que no recurre mas que a pasados
 después de media noche.

La recamara de sus padres,
El sillón de un amigo,
El parque más transcurrido de su vieja ciudad,
La iglesia que por siglos la mirara con pecado,
Las sabanas de cualquier hotel al sur del país.

Dejar de ser la amiga de… el, de alguien.
Dejar de ser la esposa de… el, de alguien.
Café, tequila, canela, marihuana.

Dejar de ser la amante, de… el, de alguien.
Dejar de ser la puta, de… el, de alguien.
Café, tequila, canela, marihuana.

Recurrirá a acecinarte en sueños,
Violar tus deseos,
Despojarte de tu presente,
Dejarte una vez a más desnudo ante la nada
Y por la razón necesaria, sin ti.

Secar sus labios, por sus silenciosos te amo,
Sus manos sin movimientos y recato,
 Las caricias con la mano bajo el pantalón,
Y el deseó tras las ganas de no dar lo que no es mío.

La estúpida prosa, y las ganas de que se la relate una vez más.

Un blues para nada, que cura todo.
Un libro para nada, que mitiga todo.
Una pluma, una hoja y esta nostalgia real,
De que realmente, ya no le escribe.

En que momento dejaste secar las lagrimas en la almohada,
Por que tu colchón se tiro al olvido
Después de las noches en vela.

Le suspiraste a la nada,
Brindaste por algo más,
Te indigno el clima,
Y deseaste no sonreír un día.

Tequila, por vodka.
Sociedad, por soledad.
Nitzchen, por Benedetti.
Hombres, por libros.
Poesía, por jurisprudencia.
Deseo, deseo, deseo, por nada.
Tres veces más puede que aparezca
Deseo, deseo, deseo.

Ya tus suspiros fueron más nítidos,
Y su recuerdo menos promiscuo,
Ya tus deseos fueron menos egoístas
Y tu cuerpo más accesible.

Ya tus letras dejaron los menesteres,
Y la escritura la inspiración.
Y me preguntas,
¿Por qué la falta de apetito mujer?
Será por que no estas tu!
A venga estúpida la exposición.
Un maldito año de asueto y los nervios de la nada.